Quizá el lector se sorprenda al leer el título de este artículo, pero a medida que avance en su lectura, comprobará que en nada se aleja de mi acostumbrada conducta y respeto por el lector.
La semana pasada, estaba tomando un café con un amigo frenteamplista sufrido, y en cierto momento, le comenté que en Junio de 2010, los medios de difusión daban a conocer un artículo mío sobre los “Cien días de gobierno” del Frente Amplio y del presidente José Mujica.
Le actualicé algo de lo que en él decía en estos términos: “El tema que desespera y exaspera al gobierno es definitivamente la falta de armonía entre sus dirigentes, la incoherencia política e ideológica de los grupos que integran el partido de gobierno, la ansiedad por lograr cargos y la falta de oficio de muchos de los integrantes del gobierno".
La solución, aunque parecería simple a primera vista, es mucho más complicada de lo que parece.
En primer lugar, porque no existe poder humano que modifique la actual estructura del FA-EP-NM sobre la que el gobierno no tiene control, por lo que está obligado a la obtención de consensos permanentes con los distintos grupos con el fin de obtener una mayoría que apruebe las modificaciones que necesita el Ejecutivo o tomar medidas anárquicas como las que ha tomado al expulsar al ministro Lezcano y al integrante sindical del directorio de UTE y que seguramente la purga seguirá hasta que en los cargos de gobierno sólo queden los integrantes del MPP y del PartidoComunista .
No obstante las enormes expectativas que la mayoría tenía de este gobierno, en el ambiente flota un olor de incertidumbre, producto de que no dejamos todos de darnos cuenta de que está contra el tiempo y, de que con las medidas que proponga estará siempre entre la espada y pared”
Mi amigo, angustiado y sufriente frenteamplista, me afirma que tengo razón, que en el fondo el Gobierno es un “quilombo” pues cada uno hace lo que se le antoja y no hay voz de mando y que el Presidente Mujica cada vez que se da cuenta que sólo le dejaron la administración y mantenimiento del 710 de la Pza. Independencia, toma medidas que la barra aplaude, pero que resquebrajan el tan conflictivo colegiado que gobierna su partido.
Con decepción me comenta que el ejemplo está en cómo los dirigentes y los gobernantes ignoran y combaten al presidente Mujica , y me desarrolla una serie de ejemplos tales como que el parlamento no consigue aprobar una ley sobre el aborto, cómo Mujica se victimiza cuando Vázquez le hace saber a través del silencio que está en desacuerdo con su política “rodillera” con Argentina , cómo su esposa y senadora opina de todo y de nada, y así siguió con una aburrida lista de indisciplinas partidarias, como ya harta al pueblo con aquello de que en un principio resultó gracioso de que “como te digo una cosa te digo la otra”, lo cual, además de dar letra a las murgas nos expone internacionalmente a la burla.
Mi amigo frenteamplista, me decía que él no se explicaba cómo la prensa y la oposición, no se daban cuenta que repitiendo ese absurdo “latiguillo” ridiculizaban a todo el sistema político de Uruguay y que era hora de pasarlo al olvido por ser una grosería intelectual y política.
No entiende mi amigo, porqué el Presidente, su señora esposa y su entorno atacan en forma permanente a la prensa culpándola de todos los males y se preguntaba si la inseguridad : es culpa de la prensa que divulga los delitos, si el fracaso en la salud: es culpa de la prensa, si el desastre en la educación: es culpa de la prensa que sólo expone imágenes de los locales totalmente derruidos y no de los pocos que sólo están semi derruidos y publican el contenido de los libros con textos subversivos y de adoctrinamiento , si las cárceles destrozadas son culpa de la prensa que mostraba en directo las imágenes de los destrozos ,si la sumisa relación con Argentina es culpa de la prensa que pregunta por las trabas, por el dragado del canal de Martín García, por el contenido de los informes que demuestran que UPM no contamina y sí contamina el Riachuelo.
Y se seguía preguntando mi sufrido amigo si es culpa de la prensa que se haya demostrado la corrupción y el pago de coimas a integrantes argentinos de la CARP, si es culpa de la prensa que se esté poniendo cada vez más trabas a la venida de turistas argentinos a Uruguay , si es culpa de la prensa que la votación interna del FA fuera un fracaso y que la representante socialista se adueñara de los votos dejando en el camino a los radicales del MPP y a los comunistas, si es culpa de la prensa que el gran resultado de las elecciones frenteamplista fue la fragmentación del partido y la supremacía de la “izquierda caviar” sobre la “izquierda mortadela” , si la prensa lo obligó a expulsar al ministro Lezcano, pues se infiltró en su despacho y le robó información , si es culpa de la prensa que Mujica se burle de la oposición y no cumpla con el acuerdo educativo y así continuó mi amigo, durante el tiempo que saboreábamos tres café cada uno , elaborando una lista de hechos épico e hípicos del Presidente Mujica durante estos tres años.
Finalizada esta informal terapia de café, le dije a mi amigo que lo comprendía, pero que estaba totalmente equivocado, que el Gobierno no era un “quilombo” , que ojalá lo fuera, pues la organización de estas comunidades era una especies de república muy ordenada y con un fuerte sentido de la libertad y de la disciplina, respetaban una jerarquía, mandaba uno solo, no se permitía el ingreso de individuos sucios, antes de ingresar debían bañarse, el que organizaba líos o disputas o contrariaba las decisiones del jefe se le expulsaba.
Quizá si Mujica hubiese aplicado en su gobierno la sencilla organización del “quilombo”, se le hubiese hecho más fácil su gestión, y es que por no apegarse a este tipo de organización todavía no ha caído en cuenta de una realidad que es inherente a la función de gobernar y es que todos los gobiernos llegan a un momento, en su evolución, en el cual caen en cuenta que ellos no gobiernan a las circunstancias, sino que son las circunstancias las que los gobiernan a ellos y que la función de gobernar no es más que una permanente elección entre dos opciones: la opción de escoger una decisión desagradable políticamente pero beneficiosa y la opción de escoger una decisión agradable políticamente pero catastrófica en el futuro.
En este momento, el gobierno exhibe un poco de las dos cosas, el resultado de ambas lo veremos a corto o largo plazo. Pero, inevitablemente lo veremos. Sea o no un “quilombo”.
Los “quilomberos” cuando se organizaban como sociedad, lo primero que hacían era identificar a su enemigo cosa que no ha hecho el presidente Mujica con su entorno, cosa que ya es tarde para identificar, igual ellos solos se sacaron la máscara y ya se sabe que el enemigo del gobierno no es el Partido Colorado, el enemigo del gobierno no es el Partido Nacional, el enemigo del gobierno no son las Fuerzas Armadas , y ninguno de los integrantes de ellos son "cuervos" que filtran y difunden información perjudicial para la salud política del señor Presidente, que bien dañada esta ya.
Hoy el enemigo del gobierno, donde están los "compañeros cuervos" que se esconden detrás de las paredes del 710 de la Pza. Independencia, es el FA-EP-NM Y EL PIT-CNT, porque la crisis interna que está viviendo, se va a reflejar inevitablemente en la acción del gobierno y por lo tanto en el bienestar del pueblo.
Ellos no son un cuerpo aislado de la realidad del país. Ellos han recibido una responsabilidad: la responsabilidad de poner el país en marcha y precisamente no pueden poner el país en marcha mientras estén enredados en sus mezquindades, en sus problemas internos y están restándole al gobierno la capacidad de creación y de iniciativa que deberían dedicarle a las labores del país y no a sus problemas internos.
Jorge AZAR GÓMEZ
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